Ir al contenido principal

El gobierno de las diez plagas

Todos conocemos las famosas «diez plagas de Egipto»: conversión del agua en sangre, invasión de ranas, piojos, moscas, peste del ganado, úlceras, lluvia de fuego y granizo, langostas y saltamontes, tinieblas y muerte de los primogénitos de Egipto. Las urnas han hecho que tengamos un gobierno que acaba de cumplir su primer año y sufrimos unas modernas diez plagas que hacen reflexionar por qué merecemos un destino tan triste y aciago.

1. Regreso al comunismo

La novedad no es un gobierno socialista, que en casos anteriores ha hecho cosas buenas y malas, como todos los que hemos tenido en democracia, sino el añadido de la desafortunada llegada del comunismo. En ese sentido tenemos que estar desolados, porque ni siquiera es el comunismo exquisito e intelectual que irrumpió en la Europa de la posguerra. Las urnas nos han entregado a jóvenes ambiciosos que no pudieron hacer carrera universitaria y encontraron en el activismo del 15-M una buena profesión.

Los que gritaban airados «no nos representan» y se alzaban iracundos contra el sistema promoviendo escraches, ahora han abrazado el ascensor social de los ministerios, secretarías de Estado, direcciones generales, asesorías, alcaldías o concejalías. Miles de comunistas y antisistema ahora son el sistema en mayúsculas, aunque siguen instalados en la spanish revolution que nos conduzca a un «paraíso» similar al de Chávez y Maduro en Venezuela o los Castro en Cuba.

Porque el comunismo no desapareció de Europa con la caída del muro de la vergüenza de Berlín, sino que se ha reciclado en este nuevo populismo antisistema. Ahora, con los ingresos que reciben como altos cargos pueden disfrutar de la vida regalada con la que nacieron. La primera plaga ha sido, sin lugar a duda, el regreso del comunismo al Consejo de Ministros y que tan triste recuerdo dejó durante la Guerra Civil.

2. La mala gestión de la pandemia

Hemos sufrido la llegada de la pandemia, que, por supuesto, no es culpa del gobierno socialista-comunista, pero que se ha gestionado rematadamente mal. No llegó la Nueva Normalidad que se anunció con grandes alardes, sino que estamos en la cuarta ola y con la noticia de que no llegarán las vacunas previstas.

Nada es culpa del gobierno, pero cabe preguntarse por qué siempre estamos peor que nuestros vecinos de la UE.

3. La debacle económica

La tercera plaga es la debacle económica que nos afecta y que se está enmascarando con un brutal endeudamiento que no ha dado lugar a una crisis de deuda soberana gracias al BCE.

España es el país de la zona del euro que menos ha gastado en relación a su producto interior bruto (PIB) para afrontar la crisis que ha desencadenado la pandemia del coronavirus. El porcentaje del paquete de ayudas en nuestro país es del 1,3% del PIB, muy por debajo de la media de la Eurozona, que ha invertido algo más del 4%.

4. Paro

Otra plaga es el paro que ha provocado y que los ERTE están escondiendo, también, pero que aflorará este año, que será el peor de la crisis. Los que cobran del erario, como sucede con estos beneficiados por el ascensor social, pueden seguir instalados en su «juego de tronos» ajenos a la realidad catastrófica que vivimos.

5. Pesimismo

Hay que incluir en esta relación la situación de tristeza y pesimismo generalizado que se ha ido instalando en la sociedad, tanto por la pandemia como por los problemas económicos que afectan a empresas y familias.

Para todos, sin excepción, el año que terminó fue el año del virus que trastocó nuestras vidas. Para muchas familias el impacto ha sido profundo e irreparable. Este tiempo pasará a la historia como la época de la prevención distanciadora, de contactos sociales virtualizados, de crisis económica y de incertidumbre extrema.

6. La suspensión de la democracia

En 2020, los ciudadanos de todo el mundo hemos experimentado el mayor retroceso de las libertades individuales jamás vividos en tiempos de paz... y también de guerra. Según el informe Democracy Index publicado anualmente por el prestigioso semanario británico The Economist, España ha retrocedido 6 puestos en el Índice de calidad democrática desde que PSOE y Unidas Podemos gobiernan. Con una nota de 8,12, nuestro país ha quedado relegado al puesto 22º de la clasificación.

La pandemia como excusa para todo, incluso para suspender la democracia. Nuestros gobernantes han usado la pandemia para imponer sus sueños intervencionistas más salvajes, desde la prohibición a la sanidad privada de tratar pacientes contagiados o realizar pruebas de COVID, hasta los controles de precios o los cierres empresariales forzosos. La mentalidad intervencionista y autoritaria ha encontrado en el virus la excusa perfecta para dirigir la vida de millones de ciudadanos. Y las consecuencias, en forma de desabastecimiento, caos y crisis económica no se hicieron esperar. La globalización se detuvo y todos conocimos de primera mano que impedir la libertad de intercambios a nivel mundial trae consigo empobrecimiento y miseria.

Los vientos soplan en contra de la democracia en la extraña era poscovid. La seguridad se impone a la libertad; la salud a los derechos cívicos fundamentales.

2020 ha sido el año en el que se han advertido señales inequívocas de un intento de derribo de nuestro edificio constitucional: controlar la Fiscalía, repartirse el Poder Judicial, suspender la obligación de responder a preguntas de Transparencia, crear un Comité de la Verdad formado por miembros del Ejecutivo para controlar lo que publiquen los medios no controlados por el mismo, decretar un Estado de alarma de 6 meses en el que el presidente ha delegado lo que no puede delegar y donde no debe rendir cuentas ante las Cortes, neutralizar al discrepante (y a la oposición) mediante el insulto y el descrédito, blanquear los actos de terroristas y golpistas, etc.

Muchos expertos en derecho político aconsejan ir pensando ya en nuevas formas de participación política y social, puesto que el virus ha llegado para quedarse durante mucho tiempo. El futuro de la libertad está en manos de quienes se atreven a defenderla en los momentos en los que es más cuestionada.

7. La crispación política y el autoritarismo

Otra plaga es la crispación política que ha provocado el comunismo, porque en los tiempos del bipartidismo nunca se llegó a los niveles actuales. La inclusión de este factor en la ecuación explica esta realidad. El nivel bronco, el uso de la mentira y la descalificación personal, utilizando las redes sociales o pseudo medios de comunicación, es algo que viene, precisamente, de los tiempos del 15-M.

Ni socialistas ni populares habían hecho este tipo de cosas. Había unas líneas rojas que nunca se atravesaron. Ahora todo vale y el conocimiento histórico muestra que ha sido la estrategia de los totalitarismos. No hay más que recordar lo que hacían los estalinistas, maoístas, castristas, nazis o fascistas. Hay un incuestionable y trágico hilo conductor que une siempre a los autoritarismos de cualquier signo.

8. Los independentistas y los herederos de la ETA

Las iniciativas que se están aprobando solo buscan el frentismo y la división de la sociedad por motivos estrictamente partidistas. No es exagerado calificar de plaga el peso que han adquirido los independentistas y los herederos de la ETA.

Los que quieren destruir España ahora se sienten poderosos gracias a la debilidad del PSOE que los necesita para garantizar la gobernabilidad y su poltrona.

9. Retrasos en la vacuna

Cuando parecía que la vacuna lo resolvería todo, hemos conocido su retraso, así como unas nevadas como no habíamos sufrido provocando un gran coste económico y humano. No entiendo que se pueda hacer un balance positivo y esperanzador con unos indicadores tan catastróficos y un panorama tan inquietante.

10. Pérdida de prestigio internacional

Finalmente, España ha perdido peso y prestigio internacional, como hemos visto con la chapuza de Gibraltar o con la amenaza de Marruecos de apropiarse de Ceuta y Melilla, que debería provocar vergüenza e indignación. No somos ya un país atractivo para los inversores nacionales e internacionales.


Entradas populares de este blog

#GobiernodeChapuzas: 50 errores imperdonables

Los errores e improvisaciones del Gobierno de España en la gestión de la pandemia por coronavirus vienen siendo constantes y gravísimos. Parece que la ciudadanía comienza a "despertar" y se está empezando a dar cuenta de tanta negligencia, y hartos de ello,  en las redes sociales los hashtags #GobiernodeInutiles, #GobiernodeChapuzas, #SánchezVeteYa y #GobiernoDimision son tendencia desde hace días. Incluso se han celebrado varias manifestaciones virtuales ciudadanas para protestar contra las medidas y actuaciones del gobierno de coalición, llegando a pedir su dimisión en bloque. Pero la ineficacia de nuestros dirigentes ha traspasado fronteras . Medios internacionales como el diario británico  The Guardian ha criticado la pésima gestión de Pedro Sánchez, y la prensa alemana también se ha hecho eco de ello diciendo que " España deberá preguntarse cómo pudo ocurrir algo así ". Incluso la OMS pone a España como ejemplo de lo que NO hay que hacer. Un informe in...

CoronaHumor: meteduras de pata y frases épicas de nuestros ministros

Resulta alucinante la incultura e ineptitud de nuestros gobernantes y dirigentes. Es para llevarse las manos a la cabeza. ¡Dios mío, en manos de quiénes están nuestras vidas! Sea por el motivo que sea, en las carreras de los personajes públicos hay escándalos mayúsculos y meteduras de pata muy difíciles de olvidar y, por supuesto, objeto de memes y burlas. Éstas son algunas de las frases épicas de nuestros políticos, ministros y científicos "expertos" en relación al coronavirus: La Ministra de Trabajo y los ERTE En éste vídeo la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, trata de aclarar las dudas de los periodistas sobre los ERTE. ¡De auténtica vergüenza! La explicación ha suscitado numerosos memes como esta parodia , que se ha hecho viral, en la que la actriz Toni Acosta hace un paralelismo cambiando el tema de los ERTE por los ERCE (expediente de regulación de cumpleaños encerrados) . El coronavirus "D-iciembre 2019" de Ayuso La preside...

El populismo casposo de Podemos

Populista es todo aquel que promueve, en la lucha política, la división social en dos grupos homogéneos y antagónicos ("ciudadanía" vs "casta") y aplica políticas autoritarias revestidas de democracia . La irrupción de movimientos populistas ha tenido consecuencias importantes sobre nuestro sistema politico de partidos: la fragmentación del panorama electoral, la polarización ideológica, la acentuación de dinámicas centrífugas en la competición política, y un 'efecto contagio' que ha afectado a las formas e ideas de los partidos tradicionales. Nuestros regímenes democráticos son regímenes de opinión pública a través de la cual, el populismo va calando entre unos gobernantes que no quieren ser "impopulares". De este modo se va imponiendo la opinión de una mayoría no cualificada ni suficientemente informada . Tras las últimas elecciones, el PSOE pasó de negarse a pactar con Podemos (por considerarlo un partido populista destinado a transformar...